La gestión de proyectos se ha convertido en una de las carreras profesionales con más proyección y ha suscitado el interés de personas de campos muy diversos, dada su transversalidad. La figura del Project Manager se suele asociar – única y erróneamente – al terreno de los negocios, las finanzas y la administración de empresas, pero lo cierto es que son muchas más las áreas en las que opera. En la actualidad, sea cual sea su origen, la mayoría de compañías importantes dividen el trabajo en proyectos – sujetos a unos objetivos – y no solo en tareas.
En este artículo te contábamos todos los detalles sobre este perfil profesional: su entorno, sus funciones, sus habilidades,… Ahora queremos darte algunas ideas para dar con este empleo, pero primero debemos preguntarnos cuáles son los campos que pueden ofrecer un puesto de Project Manager:
Dónde encontrar empleo como Project Manager
Como hemos apuntado, muchas empresas de distintas áreas requieren a profesionales que lideren proyectos encaminados a alcanzar unas determinadas metas. Estas son algunas de ellas:
Comercio: el Project Management puede estar enfocado a cualquier actividad comercial siempre que se planteen objetivos relacionados con la productividad, el incremento de las ventas y la ampliación de mercado. En este sentido, el sector de las empresas B2B es uno de los que tiene más demanda de gestores de proyectos, por operar en un mercado relativamente nuevo pero muy competitivo y en constante cambio.
Finanzas: son muchas las empresas que buscan nuevas alternativas y modelos de financiación, así como también aquellas que lo ofrecen. Los proyectos financieros tratan de ayudar a la expansión y el crecimiento económico, no solo en términos de ventas. También median en fusiones, sinergias y otras actividades monetarias entre empresas.
Marketing: aunque el marketing se considere como un apoyo a las ventas, tiene sus propios objetivos. El gestor de proyectos de este campo debe ser un gran conocedor del producto y el mercado en el que se mueve para abordar todas las mejoras que lleven a crear un posicionamiento de marca que repercuta en una mayor eficacia de las ventas.
Industria: el sector primario, interna o externamente, suele necesitar directores de proyectos que aporten valor a la gestión de los recursos y los costes, el capital humano, la instalación de nuevas factorías y la investigación y desarrollo (I+D).
Tecnología: las empresas del sector de nuevas tecnologías han capitaneado la transformación del modelo productivo a través de proyectos, y como no podía ser de otra manera, son grandes demandantes de Project Managers. La mayoría de sus proyectos tienen relación con el lanzamiento de productos y servicios o los avances en este campo, por lo que requieren un perfil muy proactivo en el aprendizaje y la vanguardia tecnológica.
Cultura: la promoción cultural suele perseguir fines sociales y comerciales relacionados con el entretenimiento y la educación, incluyendo expresiones como la literatura, las bellas artes, la gastronomía, la música o la moda. Los proyectos culturales tratan de coordinar, difundir, conservar o promover dichas manifestaciones.
Construcción: el Project Manager es muy demandado en el terreno de la construcción por la complejidad de sus proyectos. Las fases, acciones y recursos a coordinar son muchos, no solo en la construcción en sí, sino también en todo lo que se refiere al abastecimiento, la ingeniería o el mantenimiento.
Instituciones Públicas: los proyectos del sector público e institucional suelen ser de gran envergadura y pueden pertenecer a cualquier área de las mencionadas anteriormente. Lo que los diferencia del resto es que su financiación procede de fondos públicos y van destinados a la ciudadanía.
Una pista: en la actualidad, los principales destinos de esta profesión son, por este orden: Oriente Medio, Alemania, Noruega, Suiza, Estados Unidos, Canadá, Brasil, España y México.
Dicho esto, procedamos a ver algunas claves que te ayudarán a hacer más eficaz tu búsqueda de empleo como Project Manager:
Preparación como Project Manager
Antes de emprender tu búsqueda, asegúrate de tener una buena preparación. El Project Management es una profesión que abarca muchos campos de conocimiento, lo cual hace necesaria una formación multidisciplinar. Por ejemplo, si eres ingeniero electrónico y pretendes dirigir proyectos, acreditar una formación en técnico-comercial, técnico de proyectos o analista informático le dará un plus a tu CV. Los conocimientos específicos en esta materia no son solo un complemento: serán determinantes para conseguir tu puesto. Para ello, muchas escuelas de negocios ponen a tu disposición una amplia oferta formativa en torno a la gestión de proyectos. También puedes obtener la certificación de Project Manager que ofrece el PMI (Project Management Institute), así como asistir a los eventos de este sector, a través de los cuales puedes obtener certificados y diplomas.
Otro aspecto que se tendrá en cuenta es la marca personal. Más allá de tu formación y tu experiencia en puestos de trabajo similares, se valorarán mucho tus capacidades emocionales, la multiculturalidad (dominio de idiomas, viajes, etc.) y la presencia activa en las redes sociales como Linkedin o Twitter, ya que son espacios que te permiten obtener una red de contactos y buenas referencias de terceros. Dale ese valor añadido a tu currículum.
Dónde buscar empleo como Project Manager
La puja por un puesto de trabajo es un proceso complejo que requiere, también, cierta preparación. Tan clave es disponer de un CV correctamente elaborado – donde el destinatario sepa de manera clara cuáles son tus habilidades, experiencias y ventajas –, como acertar en sus canales de distribución. A continuación, te detallamos los más habituales:
Agencias de contratación / Bolsas de trabajo: es el sistema más usado, aunque no necesariamente el más eficaz. Normalmente los procesos de selección son largos dada la gran oferta de candidaturas. Algunas patronales, colegios profesionales, asociaciones empresariales, webs especializadas e instituciones cuentan con sus propias bolsas de trabajo, lo cual te permitirá afinar tu búsqueda de empleo enfocándola a tu sector. Portales online como Infojobs son menos específicos, aunque te permiten búsquedas avanzadas bastante eficaces.
Redes sociales: plataformas como LinkedIn o Meetup, además de ofrecerte una red de contactos, también son canales de difusión de ofertas de trabajo. Resultan especialmente eficaces para los demandantes, ya que pueden acceder fácilmente a los perfiles, referencias y mensajería privada de los candidatos o potenciales candidatos.
Formularios: muchas empresas disponen de formularios de solicitud de empleo en sus páginas web y a través de buzones especiales en la recepción del lugar de trabajo. Puede resultar algo laborioso, puesto que se usan plantillas específicas para rellenar tu currículum, aunque de esta manera las compañías se aseguran de recibir solo la información que realmente les interesa, lo cual les será de gran ayuda para el proceso de selección.
Mailing: es una opción poco efectiva, pero no debe descartarse. La tasa de respuesta suele ser baja, puesto que el correo electrónico posibilita muchos filtros (algunos mails pueden ir directamente a la carpeta ‘spam’) y tus destinatarios no siempre estarán en disposición de atender tu solicitud. Asegúrate de dar con el destinatario adecuado (a veces existen direcciones específicas para solicitudes de trabajo, o vinculadas al departamento de recursos humanos) y redacta un texto lo suficientemente creativo que llame su atención.
El “boca a boca”: seguro que en tu entorno conoces a más de uno que haya conseguido trabajo por recomendación de otra persona. Eso dependerá de tu capacidad de hacerte un hueco en el sector a través de tus contactos. Muchas vacantes de trabajo se comunican pero no se publican, por lo que deberás estar siempre atento y con la antena puesta. Y, cómo no, si tú eres el Project Manager en búsqueda de empleo, date a conocer, y ¡que corra la voz!
Formatos creativos: el Project Manager también debe explotar su lado creativo para seducir a sus destinatarios. Saber materializar una forma creativa de hacer llegar tu currículum puede darte cierta ventaja: Prueba con una invitación, una carta original, un regalo o tarjeta que suscite el interés de tus destinatarios.
¿Qué sucede si no eres preseleccionado?
Sea cual sea el canal que vayas a usar, incluso si acudes a todos ellos, sé paciente. En caso de no recibir respuesta, no te frustres. A veces, se trata de ser perseverante hasta encontrar tu oportunidad. Esa es una de las características fundamentales de todo Project Manager, así que puedes empezar a demostrarlo.
Muchos canales convencionales no dan un feedback al solicitante, pero los motivos pueden ser muy diversos (son sistemas complejos en los que, a veces, las solicitudes no llegan siquiera a los destinatarios correctos). También existe el agravante de la mala comunicación. Algunos anuncios no consiguen ser concisos y no tienen demasiada relación con los puestos de trabajo ofertados, por lo que si no encajas con el perfil, no siempre se tiene que deber a una carencia tuya.
Otros canales, especialmente aquellos basados en el contacto directo, pueden ofrecerte la posibilidad de pedir directamente una entrevista. Siempre que puedas, hazlo. Si tienes suerte, podrías ahorrarte el siguiente paso.
¿Qué sucede si eres preseleccionado?
Buenas noticias, has sido preseleccionado. Jugaste bien tus cartas, y se han fijado en ti. Ahora, pasemos a la siguiente ronda. Es el momento de demostrar lo que sabes. Probablemente, recibirás una notificación o una llamada en la que se te pida algo más de información. Normalmente, para acotar el número de candidatos, muchas empresas realizan exámenes detallados de sus experiencias con preguntas muy concretas. Lo que se espera de un Project Manager es que sepa responderlas con precisión, incluso cabe la posibilidad de que tengas que responder a un test de personalidad o ejercicio en el que debas demostrar tus dotes de organización y conocimiento de las herramientas de gestión de proyectos. Por eso, no estaría de menos que pudieses anticiparte a este momento preparándote una vez hayas formalizado tu candidatura.
La empresa interesada tratará de conocerte mejor antes de citarte para una entrevista, y es por ello que deberás empezar a poner en práctica tus capacidades comunicativas. Seguramente querrán conocer tu estado de ánimo y saber por qué quieres ese puesto de trabajo.
Y, no lo olvides: si te ves invitado a la interlocución, tú también puedes hacer preguntas. Puedes aprovechar para obtener más información de la empresa, en caso de que la oferta de trabajo no la detallara.
La entrevista
¡Enhorabuena! La cosa pinta bien, muy bien. Tenes hora, lugar y -quizá- el nombre o cargo de la persona que te va a entrevistar. Superaste la preselección, y ahora todo se debate entre uno o dos candidatos, incluso tres, pero no mucho más. Puede, incluso, que solo quedes tú (algunos procesos de preselección acaban determinando un único candidato, por lo que la entrevista final es solo una toma de contacto para conocerlo en persona antes de presentarle su contrato).
Debes presentarte a la entrevista con autoconfianza, pues ahora ya sabes que la empresa ha pensado en ti y se plantea seriamente contratarte. El puesto de Project Manager es un cargo de responsabilidad (en caso de salir elegido, tendrás que gestionar un equipo, entre otras), por lo que es probable que tu entrevistador sea un alto directivo o ejecutivo de la empresa. Vístete para la ocasión y ten en cuenta una vez más que, ahora sí, tus dotes comunicativas, tu personalidad y tu lado emocional juegan un papel decisivo. Es hora de demostrar que tienes madera de líder.
Además de la capacidad de comunicar, las empresas valoran mucho factores como la motivación, la actitud positiva, la visión comercial o la flexibilidad.
Si es cierto que reúnes las cualidades de un director de proyectos, gestionar tus propias emociones no debería ser un problema para ti. Afronta con naturalidad tu charla y demuestra entusiasmo. Si eres nuevo en el Project Management, las expectativas no serán las mismas que si llegas con experiencia. De ser así, no escatimes en información de las empresas en las que hayas trabajado, con resultados, cifras y todo cuanto pueda preguntarte tu interlocutor. Al fin y al cabo, estás a un paso de formar parte de su empresa, que con cierta probabilidad sea competencia directa de tu antigua compañía.
Nunca te tomes las entrevistas como un examen a tu persona, sino como una toma de contacto necesaria en la que ambas partes tienen un interés mutuo de alcanzar el éxito. Si llegas a ese punto de entendimiento -nos aventuraríamos a decir que- el trabajo es tuyo.
Y tú, ¿conseguiste trabajo como director de proyectos? Si piensas que estos consejos para Project Managers en búsqueda de empleo son útiles, o bien crees que podrías añadir alguno más, ¡adelante! Empléate en tus comentarios.