Crear incentivos para aumentar la productividad hará que tus empleados trabajen más duro, sí, pero también lo harán de una forma más inteligente.
Ya sea fomentando la felicidad y el buen ambiente en la oficina, la lealtad y el sentimiento de pertenencia al grupo o bien a través de incentivos económicos, estas 10 ideas que vemos a continuación te ayudarán a incrementar la productividad del equipo y, en consecuencia, te asegurarás de que estás recibiendo lo mejor por parte de cada miembro.
1. Comparte el plan
El principio general para aumentar la productividad de los empleados es mantenerlos felices y fomentar el deseo de esforzarse en su labor. La mejor base para esto es que cada trabajador, y en todos los niveles de la empresa, comprenda los valores de la misma, la misión, la visión y los objetivos actuales.
Es vital para la organización que un empleado sepa apreciar dónde encaja y cuál es su papel en esa estructura ya que así se sentirá incluido y asumirá esos objetivos como propios.
2. Predica con el ejemplo
Si deseas que tus empleados mejoren su productividad, es fundamental que les muestres cómo se hace. Hazles saber que el trabajo que se está desarrollando es importante. Debes tener cuidado de no dar la impresión de que crees que tu equipo es incapaz de hacer la tarea sin ti. Si estás asumiendo la labor de liderazgo tienes que dar a los trabajadores la oportunidad de tomar decisiones y de resolver los problemas por sí mismos.
3. Realiza encuentros sociales
Esto puede ser tan fácil como realizar una breve pausa para comer fuera de la oficina con todo el equipo. Las paradas regulares y controladas son fundamentales para mantener el cerebro fresco y activo, y que el trabajo se lleve a cabo con todo el potencial. Estos encuentros sociales fomentan la unión del grupo. Si un empleado se siente conectado con los demás y sabe que forma parte de un equipo será más fácil que se sienta bien en el entorno de trabajo.
4. Permite trabajar en horas que no son las habituales
Trabajar durante las horas que mejor funcionamos incrementa nuestra productividad. Clic para tuitearHay personas madrugadoras. Otras, en cambio, funcionan mejor por la noche. Si permites que tus empleados programen sus horas de trabajo de manera diferente al horario habitual de oficina lograrás que trabajen mucho más a gusto y concentrados, y serán mucho más productivos si lo hacen en esas horas en las que su rendimiento es más elevado.
Cada vez más empresas facilitan a sus empleados trabajar desde casa. Los recientes avances tecnológicos han hecho que, siempre y cuando alguien tenga un teléfono y un ordenador, sea posible trabajar desde cualquier lugar. El proyecto se verá beneficiado si favoreces esa flexibilidad horaria para que puedan planificarse y sacar el máximo partido a esas horas en las que son más productivos.
5. Ofrece retroalimentación regular y consistente
Los empleados necesitan estar seguros de que se encuentran en el camino correcto y están haciendo lo que de verdad deben hacer. Realizar una monitorización y seguimiento del progreso, con reuniones regulares con los miembros del equipo, permite no solo comprobar si esos objetivos se están cumpliendo, sino también que se planteen las preguntas que puedan surgir y aclarar las dudas al respecto.
Si no existe retroalimentación y sienten que nadie los está apoyando, los empleados pueden volverse apáticos y estar desmotivados. Con un feedback constante, sin embargo, van a sentirse seguros de lo que están haciendo, estarán más motivados para trabajar de manera eficiente y, con todo ello, se conseguirá aumentar la productividad.
6. Introduce incentivos económicos a todos los niveles
Las bonificaciones a final de año, por ejemplo, a menudo quedan reservadas para los miembros de la dirección de una organización. Un programa de incentivos bien estructurado, aplicado a todos los niveles de la empresa, se convierte en un sencillo modo de aumentar la productividad de los empleados de todos los escalafones de la organización. Después de todo, el aumento de la productividad llega a través de algo que mueve a la persona a esforzarse y trabajar duro, y a veces no hay mejor incentivo que el dinero.
7. No subestimes el poder del reconocimiento
El dinero es un importante motivador pero no debemos olvidar otros factores que, en ocasiones, pueden motivar incluso más que la parte económica. Reconocer los esfuerzos de alguien y alabar un trabajo bien hecho puede tener un gran impacto. Este gesto demuestra que el trabajo duro no pasa desapercibido y que el empleado es un miembro valioso del equipo. Todo ello consigue fomentar la lealtad de los trabajadores, ya que el empleado se siente comprendido y valorado.
8. Celebra las pequeñas victorias
Esto va unido al punto anterior, puesto que celebrar los logros es parte de ese reconocimiento. Y no es necesario esperar a terminar un proyecto para felicitar a alguien por su contribución o para darle las gracias por un trabajo bien hecho. Cada vez que veas a alguien que ejemplifica el tipo de trabajo que se está buscando, regálale unas palabras de aliento y de agradecimiento. No cuesta nada y significa mucho.
9. Relaja las restricciones de Internet
Esto puede parecer contradictorio, pero permitiendo a los empleados que puedan consultar sus redes sociales en el trabajo o ver vídeos de YouTube es posible aumentar la productividad. Los descansos que hemos comentado anteriormente son importantes para mantener a la gente activa y motivada, y la capacidad de hacer un alto en el trabajo para mirar las redes sociales puede ayudar a las personas a reorientar su tarea y su concentración sin moverse de su sitio.
10. Fomenta la formación de los empleados
Ayudar a tus empleados a mejorar sus habilidades o continuar con su formación demuestra que estás invirtiendo en ellos. No solo los trabajadores se sienten valorados con este gesto, sino que cualquier formación adicional les ayudará a hacer mejor su trabajo. Es un ganar-ganar.
Una organización depende de sus trabajadores para obtener unos resultados y lograr un beneficio. Y aunque existen multitud de maneras con las que poder incrementar las ganancias, el mejor método que tienes para ello es aumentar la productividad de los empleados. Eso sí, no se puede forzar a que trabajen más duro, tienen que querer hacerlo.
Pon estos diez consejos en práctica y conseguirás que tus trabajadores funcionen a toda máquina y tu cuenta de resultados mantenga una línea creciente.
¿Tienes algún otro consejo para aumentar la productividad de los empleados que funcione en tu entorno de trabajo? Lo puedes compartir con nosotros en los comentarios.